Bañando a mi pez nace como un blog de escritura que Celia abre a los 13 años, para la clase de informática. Desde entonces, Bañando a mi pez comenzó a instalarse en cada rincón de su vida y a día de hoy van de la mano a todas partes. A lo largo de esos años, el blog se ha nutrido primero de pequeños artículos de opinión y ensayos para, después, inundarse de poemas distribuidos en cuatro etapas:

ANTES, que habla del descubrimiento de la escritura como medio con el que expresar ideas y emociones.
DURANTE, que cuenta los cambios del paso del instituto a la universidad.
DESPUÉS , que ahonda en el primer amor, la primera ruptura y las primeras lecciones de madurez.
DESPUÉS NO, AL DÍA SIGUIENTE, que trata las sensaciones de miedo y ansiedad que acompañaron durante todo el proceso.

Todos los poemas que componen la exposición están ordenados cronológicamente y van acompañados de una fotografía. En un intento de huir de lo literal, cada una de ellas guarda relación con el contenido del poema que acompañan y con la idea general de la exposición.

En el momento en que Celia busca dotar de una mayor creatividad a sus poemas, Lucía aparece como la persona idónea para ello. A través de su objetivo, Lucía ha puesto cara a los 26 textos en los últimos meses:

Todas las imágenes tienen el mismo diseño: son en “blanco y negro” y son en “color” a la vez. Y es que nosotros almacenamos los recuerdos en el mismo formato: usamos un filtro que lo vuelve todo oscuro cuando queremos cerrar una puerta, y para aquello que nos ha hecho sentir bien encendemos una luz. Y así, guardamos todas nuestras fotos en una sola posibilidad.

“Bañando a mi pez” es la historia de un recuerdo. Cuando Celia me enseñó sus poesías, un año después de que la historia terminase, me di cuenta que no todas las cosas malas que me contaba las veía tan malas un año después, igual que no todas las cosas buenas parecían tan buenas. Así fue cómo surgió la idea de la exposición: volver a recrear sus recuerdos, y esta vez, mostrarlos con todos sus matices.

 

_{Cristales / Poesía: Celia Sánchez Morrón / Fotografía: Lucía Prados}